Más de 12 millones de dólares deberá pagarle Laidy Gómez a Freddy Bernal «por daño moral». Así lo ha ratificado el Juzgado Superior del estado Táchira, atendiendo a la demanda realizada en junio por el actual gobernador de la entidad. ¿La razón? Una supuesta «difamación». Bernal aseguró que Gómez intentó manchar su nombre al llamarle «contrabandista» y acusarle de beneficiarse del comercio irregular de la frontera colombo-venezolana.
El toma y dame entre Bernal y Gómez data desde las elecciones regionales del 2017, en las que salió victoriosa la candidata de Acción Democrática, pero su juramentación ante la Asamblea Nacional Constituyente fue vista como traición por Henry Ramos Allup, por lo que Gómez tuvo que refugiarse bajo el manto de Bernabé Gutiérrez y ‘la otra AD’. Mientras tanto, el oficialismo nombró a Bernal como «Protector del Táchira», dándole poder y potestad sobre recursos y la toma de decisiones en la entidad. Esta dualidad de poder en el Táchira lleva años siendo una pugna que nada ha aportado a la resolución de la crisis de servicios básicos que atraviesa el estado fronterizo.
Al perder su reelección el 21N contra Bernal, Gómez quedó en una situación vulnerable: sin el apoyo de la oposición y fichada por un oficialista sediento de venganza política (¿o personal?). La «persecución» ahora se concreta en una decisión judicial que le exige el pago de una absurda cantidad de dinero y el embargo de su vivienda. Un alto costo a pagar por señalar las irregularidades fronterizas que acontecen en la frontera desde su cierre, hecho que no es un secreto para el periodismo ni para la opinión pública, y que amerita una investigación de gran escala.
Lo que pareciera ser una pugna de egos, se expresa también como un daño colateral de la división opositora. Si bien Bernabé Gutiérrez expresó hoy su respaldo a Gómez, su poder de influencia en esta decisión judicial es prácticamente nulo. La exgobernadora implora por una negociación (apelando al espíritu de la mesa en México), pero tal parece que las motivaciones de Bernal la dejarán fuera del juego político.