El último sondeo de la casa encuestadora Datanalisis reveló que Rafael Lacava es el actor político que lidera la aprobación e intención de voto dentro de las filas del oficialismo, superando por creces a Nicolás Maduro, los hermanos Rodríguez, Tareck El Aisssmi y Diosdado Cabello. A pesar de su negativa de postularse a las presidenciales «mientras Maduro sea el candidato», cuenta hoy con un capital político que le permitiría ganar en un escenario electoral. La gran pregunta aquí es si Rafael Lacava sería capaz de desafiar al PSUV y lanzar una candidatura independiente.
Su fidelidad al PSUV no está puesta en duda. Ha construido su carrera política desde los tiempos de Chávez, pasando por ser diputado, embajador, alcalde, y ahora gobernador de Carabobo. Sin embargo, ha logrado diferenciar su marca política del legado chavista por medio de diversas estrategias:
1. Suprimió la narrativa ideologizada «antiimperialista y anticapitalista» del oficialismo, optando por un concilio y una cooperación con las clases empresariales.
2. Se distanció de los símbolos chavistas (el color rojo y los ojos de Chávez) y construyó su propio símbolo e identidad basados en el alterego de «Drácula».
3. Enfocó su gestión en atender pragmáticamente las demandas ciudadanas, y construyó una narrativa populista basada en estrategias de gran alcance en medios de comunicación y RR.SS, haciendo uso del humor, el lenguaje coloquial, y referentes sociales ajenos a la política, como deportistas y artistas internacionales.
Valiéndose de su imagen de ‘administrador competente’, Lacava puede definirse como un actor que representa un peligro para el PSUV. Su sólido liderazgo es uno de los pocos que puede desafiar la autoridad del partido oficialista, siendo capaz (si lo decidiera) de desautorizar a Nicolás Maduro en un escenario en el que Lacava se postulara de forma independiente a las presidenciales.
Sin embargo, el ‘momentum’ político de Lacava también puede esperar. Pasadas las elecciones del 2024, si este actor continúa fortaleciendo su marca, podría tomar más fuerza dentro del PSUV, y ascender de manera natural sin la necesidad de darle la espalda a su propio partido.